Hammam Al Andalus, los baños árabes de Madrid

En pleno centro histórico de Madrid, muy cerca de la Puerta del Sol, existe un lugar ideal para relajarse y renovar cuerpo, mente y espíritu, hablamos de los baños árabes Hammam Al Ándalus. Estos baños son un excelente lugar para evadirse, para dejarse envolver por la belleza de la arquitectura andalusí, donde los aromas y sabores de la naturaleza se mezclan con una relajante y envolvente música ambiental.

El Hammam recrea los baños árabes que existieron en el Al Ándalus hace siglos, adaptándolos a nuestros días, recuperando así la esencia de una civilización meticulosamente construida entorno al agua, elemento clave en sus vidas. La construcción de estos baños árabes se asientan sobre un aljibe de cientos de años de antigüedad, aprovechando al máximo la estructura y los materiales originales de la construcción original. Lo que antaño fue una rutina de purificación del cuerpo y el espíritu, Hammam Madrid lo ha adaptado para convertirlo en nuestros días en una opción de ocio saludable.

La importancia vital del agua, perfectamente reconocida por los árabes, dio lugar a múltiples aplicaciones por parte de estos en todos los ámbitos de la vida. En su afán de conocer y aprender, en el Al Ándalus supieron aprovechar cuánto recogieron del legado romano de Hispania, muy especialmente en lo relacionado con el uso del agua. Como parte de esa herencia y, muy apreciadas por los árabes, destacan las termas romanas.

Ha sido toda una experiencia y un descubrimiento para nosotros, un espacio donde encontrarse con uno mismo y poner en orden ideas y emociones. Nada más entrar una atmósfera cálida y tenue envuelve el recorrido acompañado por una música relajante, el cuerpo entonces comienza a descargar tensiones, siendo sólo el preludio de la auténtica relajación que sentiremos al entrar en contacto con el agua. Comenzamos sumergiéndonos en las aguas de la sala templada que se encuentran a 36º de temperatura, aclimatándonos para cuando entremos en la sala caliente, donde sus aguas están a 40º.

Sala agua caliente

Nos sumergimos en las aguas calientes y después de un rato la relajación es absoluta. La calidez del agua se mezcla con un entorno que transpira paz y sosiego, sintiéndote que estás en el paraíso.

Sala agua caliente

Antes de entrar en el baño turco y aguantar mejor su elevada temperatura no hay mejor estimulo que probar las aguas de la sala fría (16º), una auténtica experiencia, un contraste térmico ideal para activar la circulación de la sangre, experimentando el verdadero ritual de contraste en que consiste un hammam.

Sala agua fría

Entramos en el baño turco, ideal para preparar nuestra piel para el masaje. Nuestra sensación al principio al no estar acostumbrados era un poco de agobio, pero según pasa el tiempo el cuerpo empieza a acostumbrarse llegando a un agradable estado de relajación. Estos baños de vapor son excelentes para la piel, ya que debido a los efectos del calor los poros se dilatan limpiándose en profundidad.

Baño Turco

Antes de entrar a la sala de masajes se encuentra la sala de reposo, donde podemos tomar un delicioso té mientras vamos eligiendo la esencia que deseamos para el masaje, pudiendo elegir entre cuatro aceites aromáticos distintos; aceite de rosa, lavanda, violeta y ámbar rojo, cada una de ellas con unas propiedades características.

Sala de reposo

La duración del masaje es de quince minutos siendo una experiencia realmente gratificante, culmen final de este recorrido durante hora y media de relajación, paz y sosiego. Ha sido una experiencia que nunca olvidaremos y que desde luego tenemos pensado repetir, ya que estos baños son un lugar mágico donde el tiempo y el espacio parece detenerse.

Sala de masajes

Más información Hamman Al-Andalus Madrid:

Dirección: Calle de Atocha, 14 Madrid
Precios: Compra online tu bono

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Hemos disfrutado de estos baños árabes gracias a una invitación de Hamman Al Andalus. Las opiniones expresadas en este artículo son totalmente personales y están basadas en nuestra experiencia. De la foto 2 a la foto 7 han sido cedidas por Hamman Al Andalus.