Oviedo, con multitud de calles peatonales es una ciudad que te invita a conocer todos sus rincones, pudiendo encontrar edificios decimonónicos, plazas, estatuas de bronce e iglesias, además de su magnífica catedral gótica. Pero si por algo se caracteriza la ciudad de Oviedo es por sus iglesias prerrománicas, situadas a las afueras de la ciudad entre verdes prados.
El firme de las calles cubierto por una fina capa de agua, sus casas de color pastel, y sus parques y plazas tan limpias y cuidadas te invitan a pasear por esta magnifica ciudad. Muestra de ello es la bonita plaza de Daoiz y Velarde, donde el suelo de tan limpio que está refleja los árboles y la fachada del Palacio del Marqués de San Feliz, edificio barroco de mediados del siglo XVIII obra de Francisco de la Riba. En esta plaza también se encuentran las estatuas de las vendedoras del Fontán, obra realizada en el año 1996 por Amado González Hevia. Ésta es solo una de las numerosas estatuas con las que cuenta la ciudad de Oviedo.
Continuamos nuestro paseo hasta el Parque de San Francisco, el mayor espacio verde de la ciudad compuesto por una gran cantidad de árboles centenarios.
Además de este precioso parque la ciudad de Oviedo guarda entre sus calles una joya gótica, se trata de la Catedral de San Salvador. Este templo comenzó a edificarse a finales del siglo XIII por la sala capitular y el claustro, y su construcción se prolongó durante tres siglos hasta la culminación de la torre a mediados del siglo XVI. Posteriormente se añadiría una girola en el siglo XVII, además de diversas capillas anexas a las naves laterales.
La catedral está emplazada en el lugar del anterior conjunto catedralicio prerrománico del siglo IX, y por esta razón y lo dilatado de la construcción del edificio actual, éste contiene estructuras de estilo prerrománico (Cámara Santa), románico (bóvedas y apostolado de la Cámara Santa), renacentista (culminación de la torre) y barroco (girola, Capilla del Rey Casto y otras capillas).
Los inicios de la construcción del templo gótico comienzan en el año 1382 bajo el mandato del obispo Gutierre de Toledo, siendo elegido como primer arquitecto Juan de Badajoz el Viejo. También participaron en la obra Juan de Candamo de las Tablas y Pedro Bunyeres con las obras de transformación del presbiterio a capilla mayor. En el siglo XVI se termina el pórtico y la torre de la fachada, realizándose en los siguientes siglos obras y mejoras en muchas de las capillas.
El pórtico de la catedral es de poca altura con tres arcos y tres puertas que dan acceso a cada una de las naves, cubriéndose con una bóveda nervada casi plana. La portada central está coronada con un relieve de la Transfiguración, y un poco más abajo se encuentran unos medallones que representan al niño Jesús y a San Juan niño.
Pasamos al interior de la catedral y nos maravillamos con su nave central, que con sus 12 metros de anchura esta separada de los laterales por arcos ligeramente apuntados y de molduración muy sencilla. En los dos últimos tramos de la nave los arcos se hacen ligeramente más esbeltos, creando una mayor sensación de ligereza.
La capilla de Nuestra Señora del Rey Casto fue edificada en el año 1705 por Bernardo de Haces y Luis de Arce, y se estructura paralela a la catedral, formando un templo a parte con entrada exterior propia a través de un jardín situado a la izquierda de la catedral. Su cimborrio de gran belleza y estilo exquisito llena de luz el interior de la capilla.
La capilla se une a la catedral por una bellísima puerta de estilo gótico tardío, construida entre los años 1470 y 1485 por Juan de Malinas. La puerta se divide en dos por un parteluz en el que se encuentra la figura de la Virgen con el Niño flanqueada en los laterales de las puertas por las figuras de los apóstoles Santiago y San Pedro, y San Pablo y San Andrés.
Justo al lado de la catedral se encuentra la iglesia de San Tirso el Real, fundada en el siglo IX. A esta iglesia se le realizaron varias remodelaciones desde el s.XII hasta el s.XX, apreciándose en ella varios estilos que abarcan desde el prerrománico al renacentista, pasando por el románico y el gótico.
En la plaza mayor se encuentra la iglesia de San Isidoro el Real, construida entre los siglos XVI y XVIII, es por ello que su fachada contiene elementos clásicos y barrocos. Esta iglesia en un principio fue proyectada para tener dos torres, aunque finalmente solo se construyó una., siendo esta la razón de sus singular configuración.
A unos 3 kilómetros del centro de Oviedo se encuentran las iglesias prerrománicas de Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, ambas situadas sobre la ladera sur del monte Naranco. El prerrománico asturiano alcanzó en estas dos iglesias su máxima complejidad arquitectónica, elementos arquitectónicos que dos siglos después se aplicarían al estilo románico.
El firme de las calles cubierto por una fina capa de agua, sus casas de color pastel, y sus parques y plazas tan limpias y cuidadas te invitan a pasear por esta magnifica ciudad. Muestra de ello es la bonita plaza de Daoiz y Velarde, donde el suelo de tan limpio que está refleja los árboles y la fachada del Palacio del Marqués de San Feliz, edificio barroco de mediados del siglo XVIII obra de Francisco de la Riba. En esta plaza también se encuentran las estatuas de las vendedoras del Fontán, obra realizada en el año 1996 por Amado González Hevia. Ésta es solo una de las numerosas estatuas con las que cuenta la ciudad de Oviedo.
Continuamos nuestro paseo hasta el Parque de San Francisco, el mayor espacio verde de la ciudad compuesto por una gran cantidad de árboles centenarios.
Además de este precioso parque la ciudad de Oviedo guarda entre sus calles una joya gótica, se trata de la Catedral de San Salvador. Este templo comenzó a edificarse a finales del siglo XIII por la sala capitular y el claustro, y su construcción se prolongó durante tres siglos hasta la culminación de la torre a mediados del siglo XVI. Posteriormente se añadiría una girola en el siglo XVII, además de diversas capillas anexas a las naves laterales.
La catedral está emplazada en el lugar del anterior conjunto catedralicio prerrománico del siglo IX, y por esta razón y lo dilatado de la construcción del edificio actual, éste contiene estructuras de estilo prerrománico (Cámara Santa), románico (bóvedas y apostolado de la Cámara Santa), renacentista (culminación de la torre) y barroco (girola, Capilla del Rey Casto y otras capillas).
Los inicios de la construcción del templo gótico comienzan en el año 1382 bajo el mandato del obispo Gutierre de Toledo, siendo elegido como primer arquitecto Juan de Badajoz el Viejo. También participaron en la obra Juan de Candamo de las Tablas y Pedro Bunyeres con las obras de transformación del presbiterio a capilla mayor. En el siglo XVI se termina el pórtico y la torre de la fachada, realizándose en los siguientes siglos obras y mejoras en muchas de las capillas.
El pórtico de la catedral es de poca altura con tres arcos y tres puertas que dan acceso a cada una de las naves, cubriéndose con una bóveda nervada casi plana. La portada central está coronada con un relieve de la Transfiguración, y un poco más abajo se encuentran unos medallones que representan al niño Jesús y a San Juan niño.
Pórtico de la catedral |
Pasamos al interior de la catedral y nos maravillamos con su nave central, que con sus 12 metros de anchura esta separada de los laterales por arcos ligeramente apuntados y de molduración muy sencilla. En los dos últimos tramos de la nave los arcos se hacen ligeramente más esbeltos, creando una mayor sensación de ligereza.
Retablo mayor de la catedral |
La capilla de Nuestra Señora del Rey Casto fue edificada en el año 1705 por Bernardo de Haces y Luis de Arce, y se estructura paralela a la catedral, formando un templo a parte con entrada exterior propia a través de un jardín situado a la izquierda de la catedral. Su cimborrio de gran belleza y estilo exquisito llena de luz el interior de la capilla.
Cimborrio de la capilla de Nuestra Señora del Rey Casto |
La capilla se une a la catedral por una bellísima puerta de estilo gótico tardío, construida entre los años 1470 y 1485 por Juan de Malinas. La puerta se divide en dos por un parteluz en el que se encuentra la figura de la Virgen con el Niño flanqueada en los laterales de las puertas por las figuras de los apóstoles Santiago y San Pedro, y San Pablo y San Andrés.
Figuras del apóstol Santiago y San Pedro |
Justo al lado de la catedral se encuentra la iglesia de San Tirso el Real, fundada en el siglo IX. A esta iglesia se le realizaron varias remodelaciones desde el s.XII hasta el s.XX, apreciándose en ella varios estilos que abarcan desde el prerrománico al renacentista, pasando por el románico y el gótico.
Testero prerrománico de la iglesia de San Tirso, y al fondo la torre de la catedral |
En la plaza mayor se encuentra la iglesia de San Isidoro el Real, construida entre los siglos XVI y XVIII, es por ello que su fachada contiene elementos clásicos y barrocos. Esta iglesia en un principio fue proyectada para tener dos torres, aunque finalmente solo se construyó una., siendo esta la razón de sus singular configuración.
A unos 3 kilómetros del centro de Oviedo se encuentran las iglesias prerrománicas de Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, ambas situadas sobre la ladera sur del monte Naranco. El prerrománico asturiano alcanzó en estas dos iglesias su máxima complejidad arquitectónica, elementos arquitectónicos que dos siglos después se aplicarían al estilo románico.
Santa María del Naranco
Santa María del Naranco fue construida en el año 842 como palacio de reposo y Aula Regia, siendo este un edificio de planta rectangular de unos veinte metros de longitud por seis metros de anchura. Su estilo artístico es el denominado arte asturiano o "ramirense", el cual se encuentra dentro del estilo prerrománico.
Es un edificio de dos pisos cuya planta inferior fue utilizada antiguamente como sala de baños y almacén, siendo el piso superior la verdadera sala palaciega, una espléndida sala abierta a los lados con dos magníficos miradores, los cuales ofrecen una magnífica panorámica de Oviedo y de las verdes laderas de alrededor.
El complejo arquitectónico al que pertenecía este edificio también comprendía la cercana iglesia de San Miguel de Lillo, erigida a tan solo 200 metros de distancia. Sin embargo, a causa del derrumbamiento de la cabecera y de parte de las naves de la iglesia de San Miguel, el Aula Regia fue transformada en iglesia durante el siglo XII.
Es un edificio de dos pisos cuya planta inferior fue utilizada antiguamente como sala de baños y almacén, siendo el piso superior la verdadera sala palaciega, una espléndida sala abierta a los lados con dos magníficos miradores, los cuales ofrecen una magnífica panorámica de Oviedo y de las verdes laderas de alrededor.

El complejo arquitectónico al que pertenecía este edificio también comprendía la cercana iglesia de San Miguel de Lillo, erigida a tan solo 200 metros de distancia. Sin embargo, a causa del derrumbamiento de la cabecera y de parte de las naves de la iglesia de San Miguel, el Aula Regia fue transformada en iglesia durante el siglo XII.


San Miguel de Lillo
La iglesia de San Miguel de Lillo es contemporánea al antiguo palacio e iglesia de Santa María del Naranco, siendo este un templo realmente singular en su forma, ya que lo que vemos es tan solo un tercio de la construcción original, pues el resto se hundió a finales del siglo XII, conservándose actualmente el vestíbulo y el arranque de sus tres naves.
La construcción resulta esbelta y muestra cierto interés de su autor por la proporciones, puesto que su altura es el triple de la anchura de sus naves. La cubierta es abovedada y fue construida mediante un sistema complejo de bóvedas de medio cañón. También cuenta con una rica decoración escultórica formada por orlas vegetales y ventanas compuestas de magníficas celosías de piedra con forma de rosetones, arquillos y figuras.
Nuestro recorrido por Oviedo nos ha servido para contemplar de cerca dos joyas arquitectónicas que sirven de muestra para conocer parte de la evolución arquitectónica, siendo sus máximos exponentes sus dos singulares iglesias prerrománicas y su catedral gótica.
La construcción resulta esbelta y muestra cierto interés de su autor por la proporciones, puesto que su altura es el triple de la anchura de sus naves. La cubierta es abovedada y fue construida mediante un sistema complejo de bóvedas de medio cañón. También cuenta con una rica decoración escultórica formada por orlas vegetales y ventanas compuestas de magníficas celosías de piedra con forma de rosetones, arquillos y figuras.

Nuestro recorrido por Oviedo nos ha servido para contemplar de cerca dos joyas arquitectónicas que sirven de muestra para conocer parte de la evolución arquitectónica, siendo sus máximos exponentes sus dos singulares iglesias prerrománicas y su catedral gótica.
* Información para la visita de Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo
Dónde dormir en Oviedo
Las posibilidades de alojamiento en Oviedo son muchas teniendo en cuenta la zonas y el precio. Nosotros nos alojamos en el Ayre Hotel Oviedo, situado a pocos metros de numerosos lugares de interés como las iglesias prerrománicas. La zona es muy tranquila para pasar unos días en la ciudad.
9 Comentarios
interesante entrada de oviedo, y bonitas fotos
ResponderEliminarMuchas gracias, esperamos que te siga gustando nuestro blog.
EliminarUn saludo Belén y Ramón
Oooooh qué de recuerdos! Nos encantan Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo, nos traen un montón de recuerdos de cuando estudiábamos arte :-) ¡Gran post!
ResponderEliminarMuchas gracias, nos alegra que os haya traído esos recuerdos. La verdad que son unas iglesias que hemos visitado en varias ocasiones y nos encantan y la ciudad de Oviedo es bellisima.
EliminarUn saludo Belén y Ramón
Hola,
ResponderEliminaracabo de aterrizar en vuestro blog.
Y no podía dejar de comentar este post de mi querido Oviedo.
Oviedo me ha visto nacer y crecer. Por sus calles he vivido muchas historias.
Gracias por este post. Da gusto ver a Oviedo por estos lares.
Saludos de una novata.
Hola Tania, bienvenida al blog y muchas gracias por tu comentario. Nos alegra mucho que te haya traído tan buenos recuerdos este post. Saludos.
EliminarPara mi gusto Oviedo es una ciudad perfecta para vivir, tiene de todo y está muy cuidada y siempre limpia. Y además el casco histórico es muy bonito. Puede que el clima no sea el ideal para vivir, pero es la factura que tenemos que pagar para que los alrededores sean tan verdes y bonitos ;)
ResponderEliminarUna pena que tuvieseis un día tan asturiano!
Un beso
Carmen
Tienes toda la razón y tenemos que volver de nuevo. lo que sí nos llamó la atención es lo limpia que es la ciudad. A parte de ello es una de las ciudades que más nos han gustado por varias razones. Una de ellas es su preciosa catedral gótica; otra son sus iglesias prerrománicas a las afueras y otra su casco antiguo y su gran número de estatuas. Además, como no, de sus alrededores tan bonitos.
EliminarUn beso
Para mí Oviedo es bello majestuoso es donde abuelo y bisabuelos nacieron llevo desde 1986 tratando de encontrar LA FE DE BAUTIZO DE MI FAMILIA Y SIGO PERDIDA NO SE DONDE DIRIGIRME SERÍA PARA MI UNA DICHA ENCONTRAR LAS IGLESIAS DONDE PUDIERAN ESTAR PERO DIOS ES MUY GRANDE YA APARECERA PERDONEN SE QUE ESTE NO LES CONCIENE BENDICIONES PARA ESE LUGAR Y SUS HABITANTES Y PARA NUESTROS ANCESTROS.
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